La cartera, extinta durante el Gobierno de Jair Bolsonaro, volverá a estar en manos de un artista popular, igual que cuando Lula nombró a Gilberto Gil hace 20 años
Después de días de rumores, la propia cantante lo confirmó este lunes tras reunirse con el próximo presidente. “Conversamos y acepté la misión, lo recibo como una misión, porque hasta para mí fue una sorpresa”, decía. Maga, como se la conoce cariñosamente, fue una de las decenas de artistas que apoyaron a Lula en la campaña electoral, y está previsto que actúe en la multitudinaria fiesta de la toma de posesión el próximo 1 de enero en Brasilia.
Con más de 30 años de carrera a sus espaldas, una veintena de discos y cuatro nominaciones a los Grammy, Menezes es dueña de algunos de los hits más retumbantes de los años 80, como Faraó y Elegibô. Fue una de las pioneras del axé music, un género musical nacido en Salvador de Bahía y muy vinculado al carnaval. En su trayectoria, la defensa de las raíces africanas de Brasil ha sido un pilar, como recordaba en una reciente entrevista con El PAÍS: “Las personas se están concienciando cada vez más y viendo que existe una diversidad cultural y religiosa. ¿Por qué en Brasil puede existir el pop-rock y no el afropop? Nosotros (los negros) somos el día a día, somos el ahora. Es solo una cuestión de oportunidad”. Con su nombramiento, Lula repite la fórmula de colocar al frente de la Cultura a un artista de fuerte tirón popular, como cuando en su primer mandato en 2003 escogió al también baiano Gilberto Gil.
Fuente: El País (España)